jueves, 19 de noviembre de 2009

Amanecer

Llegó a su fin la noche de la ausencia,
una luz nueva iluminó mi vida;
me parece un milagro tu presencia,
que por lejana sentía perdida.

Hoy te puedo decir llena de orgullo,
que superaste en mucho mi esperanza,
que mi corazón es afín al tuyo,
pues afronta los retos con templanza.

Creo que desde ahora la distancia,
ya no será barrera en nuestras vidas.
Mientras yo viva, mi amor y constancia,
mantendrán a nuestras almas muy unidas.

Llegó a su fin la noche de la ausencia...
¡Contigo regresa el alba a mi vida!


ISABEL
08/11/09

No hay comentarios: