Sereno palpita el corazón.
Entre suspiro y suspiro
desbarata sus flaquezas
y se recupera de mis locuras.
Con el pasar de los años he ido descubriendo la fuerza
que tiene la palabra ACEPTAR. Me gusta. Y la he afiliado a mi razón aunque es
probable que se me juzgue de conformista.
Si bien, acepto de antemano y sin enojo dicho
calificativo. Como he admitido decepciones, tropiezos y ausencias… Con la dignidad
con que lleva mi cuerpo las marcas que le van dejando los años: Arrugas, canas,
dolencias y limitaciones.
Eso y más acepto y aceptaré con naturalidad. Mientras no frene
este amor que siento por la vida, mientras siga soñando ilusionada y pueda
acariciar los bellos recuerdos que atesoro en el alma.
ISABEL
15/04/18
15/04/18
No hay comentarios:
Publicar un comentario